¡Hasta siempre, amigo Bernard!

En julio, hemos despedido a Bernard Paris, co-fundador del Movimiento Latinoamericano Viva la Gente-Gente que Avanza y ex integrante del Consejo Directivo de la Fundación Omar Ibargoyen Paiva.

Nació en Paris, Francia. Siendo todavía joven vino a nuestro continente  y durante los últimos 45 años se ha dedicado a la formación de los jóvenes por América Latina. Era considerado el “Pilar de la Acción”, abriendo caminos en la gran aventura itinerante de Viva la Gente- Gente que Avanza.  Desde 2001, se estableció en Montevideo, donde acompañaba y apoyaba la actividad del Centro de Formación Gente que Avanza.

Hemos hecho un  resumen de lo que vivimos con nuestro querido amigo  para compartirlo con los VLG/GQA’s y amigos por el mundo. Queríamos  hacerlo como una especie de “homenaje” a Bernard,  además de invitarles a Uds. a saborear al menos un poco de la “magia” que hemos vivido en este tiempo de gracia.

El día 22 de julio, nuestro querido Bernard se fue al cielo a la edad de 86 años.  Todavía es difícil creerlo… y le extrañamos tanto.   Sólo el tiempo y la gracia de Dios podrá curar el dolor de no verle más en su lugar de la mesa;  o de esperar que entre por la puerta con su fiel bastón, buscando su té;  o de bajar con él cada mañana para comenzar el día con los jóvenes del Centro de Formación;  o de verle cada semana,  después de la reunión con su grupo Parkingson, traernos sacos de biscochos especiales  para esos te’s “tradicionales” de los sábados.  Tantas veces le consultábamos sobre algún asunto que surgía, y le guardábamos recortes de diarios para usar con los jóvenes.

Sin embargo, a pesar de todo el dolor que significa no tenerle más presente físicamente entre nosotros, creemos que la mejor palabra para describir lo que hemos vivido es…. ¡¡HERMOSO!!   Colocamos una linda foto de su mejor sonrisa al lado de la foto de Omar en el living y cuando nos juntamos allí (que son muchas veces) vuelan las anécdotas y nos reímos recordando su manera muy especial de amar.   Es una extraña mezcla de tristeza y gozo…  tristeza cuando pensamos en nosotros mismos y la falta que nos hará, pero al mismo tiempo, un gozo profundo cuando pensamos en él ahora y la gloria que debe ser para él poder verle a Nuestro Señor con sus propios ojos, cara a cara…. ¡¡imagínense lo que debe ser ESO!!  ¡¡Qué ansias de descubrirlo algún día!!

Así que nuestro Bernard debe estar bailando allá en el cielo, y poniéndose al día con tantos seres queridos y con Omar.    Los dos siguen velando por todos nosotros  que hemos  pasado por el Elenco o por el CF… que siguen siendo  “hijos” suyos muy queridos.

Ha sido conmovedora la solidaridad de los jóvenes del CF, los coordinadores,  amigos y GQA’s de la zona y hasta varios que llegaron desde Brasil y Argentina, tomando turnos acompañándole a Bernard día y noche de los 12 días que estuvo internado. No estaba solo ni un minuto.  Y estamos convencidos de que, aunque a pesar del oxígeno y los ojos cerrados, podía escucharnos y absorber todos los mensajes de Uds. que le leímos cada mañana.   Expresan tanto amor y gratitud por todo lo que Bernard les dio, con sus palabras y especialmente su ejemplo de vida.  Aún después de su partida siguen las visitas desde cerca y lejos para acompañarnos, … y antes estuvieron una cantidad más, algunos a tiempo para despedirse de él.

Era como si esperaba que todos tuvieran su turno con él, sólo que faltaba Patricia Mariani Ferreyra quien estaba con los hijos visitando a los abuelos en Córdoba.  Llegaron de vuelta el domingo de noche.   El martes le tocaba su turno a las 6 a.m.…. y estando con ella, a las 7:30 a.m.  dio su último respiro con mucha paz.  Tantos detalles como ese nos mostraron de nuevo cuán perfectos son los tiempos de Dios… y que justamente en estos días todos los del CF estaban aquí, entre sus varias giras al interior de Uruguay.

El salón del velatorio fue sencillo y de buen gusto y tuvimos toda esa sección para nosotros para hacer el “ruido” de música y cantos que queríamos sin disturbar a nadie.   Además de las hermosas flores, el ataúd estaba cubierto de una gran bandera de Francia y entorno las banderas de los muchos países donde había estado, algunos de los que preparó para la ida del Elenco.   Sabiendo que él no quería vernos tristes, cantamos casi todas las canciones del show más las folklóricas.  Vino tanta gente, algunos que no habíamos visto por un tiempo, y algunos de ciudades del interior…. ¡fue como una gran fiesta!

En la noche nuestro amigo el Padre Marcelo celebró una Misa hermosa … muchos quedaron toda la noche… y a la mañana siguiente vino la Pastora de la Iglesia Metodista, que él fielmente asistía cada domingo, y dio su bendición.   ¡Qué lindo fue que ambos, ella y el Padre, sin saber lo que el otro diría, mencionaron las mismas virtudes que conocían de Bernard y también citaron las mismas palabras de Jesús cuando se despedía de sus apóstoles en la Ultima Cena:   “No se angustien Uds.  Confíen en Dios y también en mí.  En la casa de mi Padre hay muchos lugares donde vivir;  si no fuera así, yo no les hubiera dicho que voy a prepararles un lugar.  Y después de irme … vendré otra vez para llevarlos conmigo, para que Uds. estén en donde yo voy a estar.” (Juan 14. 1-3)

El cementerio es un precioso parque afuera de la ciudad… ¡muchos árboles, césped y paz (claro)!  La procesión de autos fue larguísima… ¡nos asombramos como se mantuvieron juntos entre tanto tránsito!   Gran cantidad de gente a pesar del frío.  Se celebraron Misas por él al mismo tiempo en varios países y con la cantidad de gente rezando, seguro que habrá volado con fuerza y rapidez en alas de tantas oraciones.    Gracias a cada uno  por su cercanía y palabras de consuelo y fe, que han sido muy importantes para nosotros.

Jeanne ha tomado todo con mucha paz y calma, fiel a su manera de ser.  Está bastante bien considerando sus casi 91 años, que celebrará el 24 de agosto.   Anda con su fiel andador que le da cierta movilidad en la casa.  A veces tiene problemas expresándose por no encontrar las palabras más sencillas, pero en vez de frustrarse dice… ¡O Señor! y se ríe!!   Gracias a Dios no pierde su sentido de humor.

Ya está muy larga esta misiva, pero no podemos terminarla antes de contarles un episodio más.  Tal vez se van a reír de la forma especial y diferente en que celebramos a Bernard dos noches después de su muerte.  Ya sabrán que había una pizzería favorita en el centro adonde  (a veces con algún joven) le encantaba escaparse furtivamente sin que supiéramos, porque allá podía comer todas las delicias que sabía no debía.

Alguien tuvo la brillante idea de que podríamos ir ahí todos juntos y en su honor comer sus pizzas preferidas con sus amigos los mozos que le querían mucho.   Pues ahí nos fuimos todos, desde los niños hasta Jeanne que se animó a ir  …(¡y comió dos buenos pedazos de pizza!)   Éramos nada menos que 28 en total sentados en dos mesas enormes, disfrutando de sus pizzas, recordando anécdotas de su vida y agradeciendo a los mozos por el cariño que le dieron en esos muchos años.  ¡Estamos  seguros  de que Bernard estaba deleitándose con todo eso junto a nosotros!

Se hizo un poco largo el relato pero es que queríamos  que todos vivieran algo de lo que hemos vivido en este tiempo de gracia.  Hemos estado en estrecha comunicación con las dos hermanas de Bernard, Elsa y Nadine, que no pudieron venir pero que vivieron todo esto junto a nosotros.

Su barrio, su torre

Su barrio, su torre

Su querida casa en Paris, donde pasó su niñez.

Su querida casa en Paris, donde pasó su niñez.

¡Siempre disfrutando!

¡Siempre disfrutando!